Victoria para Vettel, chollo para Hamilton

La carrera fue muy polémica. La cita de Valencia marcará un punto y aparte esta temporada en la fórmula 1 por la gestión que los comisarios de la FIA y el director de carrera, Charlie Whiting, realizaron de los incidentes ocurridos durante el Gran Premio de Europa . La salida había sido alucinante, con un Lewis Hamilton amenazador, que atacó y tocó a Sebastian Vettel ya en la segunda curva, y con un Fernando Alonso impecable, que pasó a ocupar la tercera posición tras adelantar a Mark Webber. No obstante, todo se trastocó cuando Webber chocó por detrás con Kovalainen en el noveno giro y su Red Bull dio una vuelta de campana en el aire y se estrelló contra el muro de neumáticos de contención.

Hamilton tardó 17 vueltas en cumplir su sanción y no perdió ninguna posición

La entrada del coche de seguridad en la pista no podía producirse de forma más polémica. Salió del carril de los talleres justo cuando Vettel acababa de pasar y cuando Hamilton estaba atacando la línea blanca de la salida de los garajes. El británico optó por adelantar al coche de seguridad. La situación resultó nefasta para Alonso y Felipe Massa, entonces tercero y cuarto, que tuvieron que dar una vuelta completa al ralentí mientras los dos primeros alcanzaban el taller mucho antes que ellos para realizar su parada. La carrera de Alonso concluyó allí. No solo perdió un podio que tenía prácticamente asegurado, sino incluso la oportunidad de ganar la carrera. Cuando la situación se restituyó, el español era undécimo y Massa circulaba perdido por la cola del pelotón.

La desesperación de Alonso era notable cuando habló por la radio con su taller para pedirles que alertaran al director de carrera de lo que había hecho Hamilton. "¡Que lo mire, avisadle!", clamaba Alonso. Los comisarios lo estudiaron y comprendieron que era incorrecto. Habían tardado nueve vueltas en investigarle y el piloto tardó 17 en pasar por delante de los talleres, una auténtica ventaja porque, además, Hamilton solo empleó 13 segundos en pasar por el carril de los mismos, circunstancia que le permitió mantener la segunda plaza. "¿En qué posición ha vuelto?", preguntaba por la radio un incrédulo Alonso.

Fue entonces cuando la FIA intentó compensar a los dos Ferrari con una investigación múltiple por el comportamiento de varios coches durante la vuelta que dieron tras pasar por su taller hasta encontrarse con el coche de seguridad: fueron demasiado deprisa. Todo el mundo esperaba una penalización de 20 segundos, que habría llevado a Alonso a la cuarta plaza. Pero fue mucho más corta: solo fueron cinco; el asturiano ganó un solo puesto y De la Rosa perdió su punto. Vettel ganó la carrera, Hamilton terminó segundo y Button, tercero. Alguersuari ascendió del 15º al 13º puesto.

Hamilton, según los comisarios, cometió una irregularidad porque vio al coche de seguridad y aceleró para pasarle en vez de frenar. Pero fue el mejor en la salida y condujo con una agresividad increíble cuando conoció su sanción para abrir un hueco detrás y mantener la segunda posición. Alonso, sin embargo, salió perjudicado por la situación, y luego no consiguió adelantar a Sutil ni a Buemi cuando los tuvo delante. "El coche tenía problemas en ciertos sectores", comentó. Y, al final, fue superado por Kobayashi, en la última curva de la última vuelta, cuando este colocó los neumáticos blandos.

La renta de Alonso fue muy pobre para las expectativas que tenía ante la carrera de Valencia, con las mejoras hechas en su Ferrari. Y todo envuelto en una gran polémica.

GP de Europa, carrera